Casi un millar de trabajadores del Grupo Prisa se han manifestado hoy por el centro de Madrid contra los 2.500 despidos anunciados por la dirección del grupo, calificados como “injustificados e injustos” por los representantes sindicales.

La manifestación ha finalizado con la lectura de un manifiesto que considera la deuda de Prisa fruto de la “ludopatía bursátil” de los dirigentes empresariales que pretenden hacer pagar a los trabajadores.

En el manifiesto se indica que “no hay razones para externalizar tareas y despedir a trabajadoras de un Grupo cuyas empresas, a pesar de la dureza de la crisis, son capaces de generar cuantiosos beneficios. El único argumento para este ERE es la deuda de Prisa, generada por la voracidad financiera, por la “ludopatía bursátil” de unos dirigentes empresariales que pretenden ahora que los trabajadores paguemos sus errores”.

“Unos errores –sigue el manifiesto- que a ellos les salen gratis ya que mientras nosotros vemos amenazados nuestros puestos de trabajo, el consejo de administración de Prisa sigue cobrando sueldos millonarios sin ningún rubor. Y con la misma desvergüenza declaran ahora al grupo en pérdidas, cuando hace unos meses alardeaban de haber conseguido más de 90 millones de beneficio”.

“El desguace que los ejecutivos del Grupo Prisa han puesto en marcha supone un torpedo en la línea de flotación de la libertad de información en este país. La precarización del empleo en los medios implica una pérdida de calidad de la información y de rebote una merma también en la calidad de la democracia”.